Carlos Suero - Evil Dance

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Nos encontramos ante el nuevo EP de Carlos Suero, y lo primero que podemos decir es que nos ha dejado un auténtico calambrazo en los tímpanos. La portada y el título ya nos advierten de lo que viene: algo oscuro, retorcido y con alma demoníaca.
Estás avisados.

“El proyecto SUERO se inició dentro de la escena EDM de mediados de los 90 en Londres, y ha ido evolucionando desde entonces en múltiples direcciones”

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Carlos Suero en pleno proceso creativo

Este EP debe escucharse del tirón, sin pausas. No son cuatro temas sueltos, sino una historia en cuatro actos, un proceso que se desarrolla y se enrosca sobre sí mismo. A continuación, nuestras sensaciones (y secuelas) tras la escucha:

One
No queda una sola frecuencia libre en este temazo brutal. Bombazos y distorsiones construyen una cama densa sobre la que se mueven voces supersaturadas que parecen responderse a sí mismas entre ráfagas de sintes. Es un muro de sonido del que no se puede escapar, pero todo está medido con precisión quirúrgica: nada se pierde, todo encaja en un caos perfectamente controlado.

Two
Aquí cambia el terreno. Más limpio, más ordenado, pero igualmente poderoso. Una base contundente y cambiante sostiene capas de sintes gordísimos que llenan el espacio con una densidad apabullante. Las voces, impredecibles y sutiles, cierran el círculo. Un tema que podríamos definir sin rodeos: una jodida pasada.

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Carlos Suero en directo

Three
Un giro sorprendente en el ritmo abre un nuevo capítulo, más dinámico, más físico. Enseguida nos lanza a un viaje energético guiado por sintes saturados y voces fragmentadas que dialogan con la máquina en una especie de discusión sinte/humano. El ritmo fluctúa, se transforma, y el final nos deja en un colapso sonoro total. Pura intensidad.

Con Evil Dance, Carlos no busca un ejercicio de nostalgia, sino “una reinterpretación de un postulado ante una escena de la cual, dicho sea de paso, jamás me sentí parte”. Esa declaración marca el tono de lo que nos encontramos: un regreso a los impulsos originales, pero con la madurez y la crudeza de quien ha recorrido un largo camino.

Four
El cierre no podía ser más apoteósico: un calambrazo de taser convertido en tema. Ritmo imparable, sintes industriales como camiones y voces completamente desquiciadas, casi infernales. Aun así, entre tanto caos, hay detalles escondidos que se descubren con una escucha atenta. No lo pongas en el gimnasio si no tienes seguro de responsabilidad civil.

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Al tímpano, sin piedad

En resumen, “Evil Dance” es un trabajo sorprendente, contundente y profundamente personal. Un juego de límites sonoros llevado al extremo, con una coherencia industrial que aplasta pero fascina. Carlos Suero logra retomar la esencia de sus inicios sin mirar atrás, proyectándola hacia un presente oscuro, eléctrico y absolutamente propio.

Nos ha encantado, como siempre. Ya sabéis que lo tenéis en bandcamp, Spotify y demás plataformas de streaming.
Os dejamos más material de Carlos Suero, como sus dos álbumes que tiene con nosotros: Anachronistich y Anachronismus, unas joyas tremendas y también el bandcamp de Carlos Suero.
Como broche final, video que acompaña al álbum.