ompartiendo todo lo grabado durante los primeros años de producción. Posteriormente, alternaría el proyecto en solitario con la participación en otros grupos, de los que destaca El Pardo.
Amante casi por igual del pop-rock más escuchado y de la experimentación más compleja, sus últimas propuestas en solitario tienden al techno, a la palabra hablada y al eco industrial. ‘Trabajo‘ es su disco largo más reciente, una epopeya conceptual sobre nuestros cuerpos derrumbándose dentro de las oficinas.
Si le dejasen, canta-hablaría siempre con (un poco de) eco.
Si pudiere robarle el nombre a un grupo, sería Suicide, porque es una afirmación de la vida.